Inquietudes tengo muchas. Cosas por decir también. Me gusta opinar. Me gusta escribir. Me gusta sentirme escuchado. Me gusta hacer el gamba. Para todo eso y para más, este blog. Son mis cosas. Optimizado para Firefox, en IE se ve hecho una MIERDA.
12.4.08
Quiero
Siempre hay una canción de Miranda! para contar como estoy
Dame un poco más, si vos me llamás no te hagas rogar si pido un poco más es solamente un poco más.
Si me ves aquí sabes que es por ti. Deberé aprender de mis errores, no es está mi primera vez.
Contra la pared, contra de tu frío. Estás tan lejos aunque te tenga aquí. No ves que mi corazón se ha acelerado desde que he entrado en tu habitación.
Y aunque nadie lo ha dicho amor, es claro lo que pasa. Vos me llamas a cualquier hora y yo me baño y voy directo a tu casa.
No quieres hablar, tal vez te convenga. En este momento pienso cosas que preferiría callar.
Contra la pared contra tu frío. Estas tan lejos aunque te tenga aquí. No ves que mi corazón se ha acelerado desde que he entrado en tu habitación.
Y aunque nadie lo ha dicho amor, es claro lo que pasa. Vos me llamas a cualquier hora y yo me baño y voy directo a tu casa.
Y no me importa aparentar, no escondo lo que siento, quiero que vuelvas a pensar lo que pensabas de mí en un momento.
Quisiera que descubras ante mí tu costado espiritual. Quisiera que te entregues corazón de una manera natural.
Tengo la idea de hacerte creer que me vas a sentir en vos. Porque bailando te convenceré para irnos a dormir los dos.
"Cuando una persona desea realmente algo, el Universo entero conspira para que pueda realizar su sueño"
"El Alquimista", Paulo Coelho
La idea me atrae. Es una idea insistente. Apareció como aparecen las ideas importantes, de una forma casi imperceptible, con voz bajita, sin querer molestar y bajo la sombra de lo absurdo.
Pero esa idea se está convirtiendo en el convencimiento de una necesidad vital.
Tiene que realizarse. Algo en mi interior lo exige a cambio de permitirme encontrarme a mí mismo. A cambio de la tranquilidad del intento. De la seguridad de no quedarme con las ganas. Debo hacerlo, y si algún día me arrepiento, será porque la conciencia del arrepentimiento es una experiencia por la que debo de pasar.
No veo el momento, se me hace eterno, pero los cimientos estarán apuntalados para que no se me acuse de incauto. Quiero que me dejen actuar, sin poner lastres, que demasiados lastres nos creamos nosotros mismos, lastres forzados, clavos culturales ardiendo para no reconocernos, para no ser libres, para no hacernos a nosotros mismos, para dejarnos llevar por la comodidad del no molestar y de lo establecido, que al fin y al cabo es lo que nos enseñan... y si nos lo enseñan por algo será.
El Alquimista, libro instructivo donde los haya, habla de la consecución de los sueños. Del valor del intento y el sacrificio. De la búsqueda de uno mismo y la paz espiritual que produce la coherencia de actuar sabiendo que merece la pena. Voy a intentar un sueño. El sueño de la libertad y del romper las ataduras.
Cada persona, cada situación, cada detalle, cada giro inexplicable, cada consecuencia de mis actos, cada gesto, cada momento de inflexión…todo es ahora un scrabble gigante en cuyo tablero sólo se puede leer el imperativo de una idea que es más bien una orden del destino. Y me anima a no desistir. Un sentimiento parecido al que tiene la capillita cuando se compromete a ir hasta la ermita de la virgen de turno de rodillas si ésta salva a su terminal hijo de comer gusanitos en el cementerio, o la chica ligerita al ponerse de rodillas a cambio de un favor laboral; para el caso es lo mismo.
Allá donde mire, veo una muestra de la conspiración del Universo para que al menos no me quede con las ganas y la incógnita. Si el Universo así lo desea, no voy a ser yo quien le haga frente.
Muchos, cuyo conocimiento de los sentimientos e inquietudes del que escribe es más que cuestionable por mucho que se afanen en suplirlo poniendo de ejemplo de su amor hacia mí sus propias vidas, espetando intentos de consejos cogidos con pinzas, me hablan de lo absurdo e inútil de mi idea, diciéndome que quieren para mí lo mejor y dándome palmadas en la espalda de caridad egoísta. Gracias por sugerir que la vida se me escapa.
Pero si la vida se me escapa, que sea haciendo lo que me da la gana.