Noches madrileñas (I)

Este fin de semana me ha venido como anillo al dedo para despejar mi mente de todo lo que necesita despejarse una mente tras un exilio voluntario.Madrid de día es precioso con su gran vía, sus trifulcas políticas, sus madroños, sus osos… pero ya era horita de correrme una fiesta en condiciones con osos de los de verdad, el estado mental que me acompaña desde que me quedé en la calle merecía una fiesta para que se fuera tranquilito a su casa y me dejara de una vez en paz.

Como agua de mayo la necesitaba, oiga.
El viaje de ida fue muy ameno, en el coche con Sergio conversando sobre acosadores y acosados y lo fácil que resulta estar en ambos grupos sin quererlo, pero esto lo reservo para un post en exclusiva.
Y eso era solamente el comienzo de mil conversaciones sobre amor, desamor, escarceos, ligues y sobre todo de sexo.
Mucho sexo.
Así que allí me planté el viernes, después de dejar a Sergio con sus asuntos y con la idea de ver el sol nada más que cuando empezara a asomarse por la ventana al poco de tumbarme en la cama exhausto tras horas de fiesta.
La primera noche fue algo increíble, para empezar, por el gustazo de conocer en persona a AbsolutMe, ese columnista del que soy tan fan y poder hablar de maduros, jóvenes, amor y desamor; pero sobre todo de que somos todas unas putas sin remedio.

Una maravilla de tío, Absolutamente encantador y de esas personas que te transmiten buen rollo y confianza desde el primer segundo de conversación y sabes que irremediablemente está condenado a ser con el tiempo un consejero estupendo y un amigo genial.
Todo este colegueo se desarrolló en un mar de pelos y barrigas en The Hot y The Angel, donde vimos en directo a La Prohibida y otras dos que no nos interesan porque no se presentan a Eurovisión ni nada de eso que ahora me gusta tantísimo.
JL también nos acompañó hasta la mitad, me cayó estupendamente, un tipo muy interesante y amigable, desde luego las referencias que me habían dado eran ciertas.
El sábado no salí del coma hasta que quedé con Jgts, que para un amigo hetero que tengo hay que cuidarlo, y nos fuimos a ver a L-Kan en concierto.

Un directo divertidísimo y muy recomendable, no me arrepiento en absoluto de haber asistido, aunque llevaba siglos sin oír nada de ellos.
Megatalifán desde ya.
Aquí tenéis el vídeo que grabé del tema suyo con el que más me identifico ‘Aburrida de estar salida’:

Tras esto, el momento indie continuó en Elástico hasta que me fui más feliz que una lombriz rumbo a Strong.
Allí me topé con uno de mis mitos sexuales: Hilario Pino, que en persona está mil veces más bueno, y es que hay veces (pocas) en las que el traje no hace justicia. Súperafavor de que presente las noticias en camiseta de manga corta, que las penas ya se sabe que con pan son menos.

"No estoy más bueno porque no entreno"

La noche allí entre unas cosas y otras se me hizo de lo más corta y me presentaron a Raúl, con el que me partí de risa. Desprende una nobleza increíble, es un cielo de chico.
El domingo salimos a las siete de la tarde más o menos, después de un brunch ligerito.
Acostarte a la misma hora en la que los abuelos sacan a sus chuchos (siempre he dicho que hay un tipo de perro diseñado por la naturaleza para personas de la tercera edad, esos cruces que ni sienten ni padecen, pequeñitos y feísimos que por lo general son de algún tono de marrón-canela) hace que al despertarte te apetezca un zumo de naranja y un sándwich más que reventar a pollazos a José Coronado.
Y por fin conocí a mis arpías de mi alma: Puñis, (pendiente queda charla sobre guantes y dilatadores, eres de lo más coherente que me he echado a la cara) La Pesada, (que para nada es pesado, más bien es un cielito) Letrina, (hablará sobre discos estúpidos, pero aunque no te lo creas, él no lo es) Anastasia Werehousen-o-como-se-diga (majete a más no poder, ya sé quién me va a invitar a merendar en otra visita) y Benelux, que aparte de estar bastante potente cantó como los ángeles con La Prohibida, (me va a salir por las orejas la travestorra esa) que dio un discurso estupendo (pero estupendo de verdad) de porqué tiene que ser ella y no otro el representante español a Eurovisión. Previamente me pude descojonar de risa con Las Fellini y tocar el cielo con los dedos… yo me entiendo.
Mi última excursión por los locales madrileños constó de una visita a un antro maravilloso, el Gris, donde viví el mejor momento del fin de semana, con una mezcla de gente estupenda (la pureza está en la mezcla, no lo olvides) y unos chupitos de Abstenta terribles; luego una escapada a The Paso donde vi por segunda vez a esa mamarracha fracasada llamada Josele Román.
Ese antro seguro que es la parada de las eminencias venidas a menos, porque también vimos a Diego Cosío el viernes.
Lógicamente, el lunes perdí el bus.
Quique... prepárate porque si este pasado fin de semana sin ti ha sido magnífico, el que me espera contigo va a ser magnífico al cuadrado.

Y gracias sobre todo a Edu TB97.
Eres un tío increíble, de los que ya no quedan.
Gracias por hacerme reír a carcajadas cuando más lo necesitaba, gracias por tu hospitalidad desinteresada, gracias por hacerme sentir como en casa, gracias por ser tan atento, gracias por ocuparte tan bien de mí, gracias por hacerme ver que todavía queda gente que va de frente (esto era de Presuntos Implicados, ¿no?) y que brinda su amistad sin esperar nada a cambio, gracias por el tour que me has hecho, por presentarme a toda esa fauna (ya no voy a mandar más piropos a los que he conocido que va a sonar poco creíble) y gracias por aguantarme.
Te haces querer.
¡Todo un lujo compartir fin de semana con el barbas más buenorro de Madrid!
Me encanta la idea de verte esta semana también, con permiso de Nubetía.